Lidiar con las marcas después de una operación de cáncer
La cirugía es una de las principales opciones de terapia contra el cáncer. Se realiza sola o en combinación con otras terapias y consiste en extirpar el tumor. Después de la operación, quedan marcas y marcas que
tendrás que aceptar, mientras esperas que su aspecto desaparezca con el tiempo. Desde el masaje hasta el maquillaje, aquí te indicamos algunas formas de afrontarlos mejor.
Después de la operación, puede resultarte difícil mirar y aceptar la marca. Según su ubicación, también puede ser difícil soportar las miradas escrutadoras de los
demás. Como símbolo de tu jornada por el cáncer, tu marca puede ser dolorosa. ¿Cómo cuidas de esta?
Masajea la marca
El cuidado de la marca pasa por el masaje: la hará más flexible y evitará que se pegue a los músculos y tejidos. Cuanto antes se lleve a cabo, mejores serán los resultados. Sin
embargo, hay que seguir algunas reglas sencillas.
Por ejemplo, no es aconsejable masajear la marca inmediatamente después de la operación. No obstante, la manipulación de la zona que la rodea permite movilizarla indirectamente mientras
se espera la recuperación. ¿Cómo sabes si es el momento adecuado? Los puntos y las costras deben haberse caído. En caso de dolor, aplica frío.
Entonces, se puede masajear la marca con geles o cremas especialmente formulados para reparar la piel.
Para asegurarte de masajear la marca en el momento adecuado, no dudes en pedir consejos a tu cirujano o médico de cabecera. También pueden prescribir sesiones con un fisioterapeuta si esto resulta demasiado
difícil o doloroso, tanto física como emocionalmente.
Después de mi mastectomía, me era imposible tocar mi marca. Entonces, pedí sesiones con un fisioterapeuta. Luego, hice una terapia post-oncológica a fin de darle aún más flexibilidad a mi piel y a mi marca y prepararme
para mi futura reconstrucción.
Carole
Mejorar el aspecto de las marcas
Si tu marca está en una zona visible, también puedes reducir su aspecto con maquillaje médico.
Hidratar
Si, además de la operación, te sometes a terapias, es posible que hayas notado que tu piel está más seca. Una vez que la marca haya madurado lo suficiente, recuerda humectarla
igual que como lo haces con el resto de tu cuerpo. Comienza con una limpieza suave con un aceite de limpieza regenerador o una barra dermatológica ultra rica; luego, huméctate con una crema
o bálsamo emoliente.
Ocultamiento
Elige un corrector según el color de tu marca: verde para reducir los tonos rojos, amarillo para los azules-morados, coral para las marcas marrones. Para igualar el color de la piel del rostro
y del cuerpo, aplica una crema de base de maquillaje compacta. Gracias a su cobertura total, pigmentación profunda, resistencia al agua y al sudor y el FPS 30, es ideal para ocultar las marcas
del cuerpo.
Además del masaje y la hidratación, es muy importante proteger la marca del sol.
Para una protección eficaz, aplica un protector solar de alta protección (FPS 50 o más) que filtre tanto los rayos UVA como los UVB y que esté especialmente diseñado para
piel sensible. Los protectores solares en barra, que pueden llevarse fácilmente en el bolsillo o en el bolso, son especialmente adecuados para proteger las marcas. Recuerda volver a aplicarlo con
frecuencia.
Si es lo suficientemente grande y está oculta por la ropa, también puedes proteger la marca con un vendaje. Una marca que no está lo suficientemente protegida del sol corre el riesgo de
hiperpigmentación con la aparición de manchas oscuras y marcas duraderas.
En cuanto a la ropa, elige prendas sueltas y livianas. Tu piel lo agradecerá aún más si se ha vuelto más sensible por ciertas terapias.
Probablemente tu cuerpo haya cambiado y tenga marcas, y eso puede ser difícil de aceptar. En este caso, no dudes en darte el gusto con una pausa suave: algunos spas ofrecen terapias postcáncer
que aceleran la reparación de la piel y suavizan las marcas, gracias a la acción combinada del agua y las técnicas termales.