Deshidratación
Sea cual sea nuestro tipo de piel, algunos factores pueden derivar o favorecer la sensibilidad excesiva: su piel reacciona con fuerza y, casi siempre, cuando no quiere que se manifieste...

Deshidratación
Características de una piel deshidratada:
• Una piel deshidratada está apagada, rugosa al tacto, sin luminosidad
• Su fragilidad está exacerbada, se irrita fácilmente
• Pueden aparecer finas arrugas como así también falta de elasticidad
• Según la intensidad de la deshidratación, puede haber tirantez localizada
• Presenta estrías de deshidratación y tendencia a descamarse
• Factores climáticos: viento, frío, atmósfera seca, etc.
• Factores exógenos químicos y mecánicos: productos de higiene y cosméticos inadaptados, detergentes, afeitado, depilación, etc.
• Factores endógenos : envejecimiento fisiológico y foto-inducido, patologías, médicamentos
La hidratación de la piel no consiste solamente en aportar agua, sino también, darle la capacidad de limitar su evaporación de la superficie. Por lo tanto, para asegurar una buena hidratación de la epidermis, un cuidado hidratante debe poder aportar a la vez: Agua, elemento indispensable para la rehidratación de las células y lípidos, para asegurar una barrera eficaz contra la pérdida de agua (y disminuir la pérdida insensible de agua: PIA)